13 noviembre 2007

202. Expectativas

Cuando esperas algo con muchas ganas, con mucha ilusión, acaba por no cumplir con las expectativas. A mí me suele pasar continuamente con las películas con las que la peña alucina. Cuando yo las veo, me parecen un tedio total y absoluto. También me pasa con otro tipo de cosas. Por ejemplo, el fin de semana pasado había fiesta en el pueblo, el segundo aniversario de la radio, y actuaban unos cuantos grupitos. Nada del otro mundo, por supuesto, pero con eso ya contaba yo y más teniendo en cuenta el lugar donde se iba a celebrar. Ruido desastroso, cantaban con Midi, en fin... un desastre. A sabiendas que esto era el percal que me iba a encontrar, yo iba bastante ilusionada y confiada en que me lo iba a pasar como los indios pero nada más allá de la realidad. Tampoco puedo decir que me aburrí pero no fue lo que yo esperaba. Enseguida me harté y aunque aguanté bastante tiempo, más de cinco horas, acabé yéndome a mi casa bastante fresca y pensando por qué coño no me quedaría en HUelva, o mejor aún, en casita, disfrutando de la tranquilidad y el descanso antes de llegar a estos momentos de incertidumbre, de cambios laborales en los que ahora estoy inmersa. Cuando piensas que todo va sobre ruedas, acaba llegando algo que jode tu tranquilidad y rompe la monotonía, pero eso ya es otra historia de la que aún no se ve el final del túnel.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Y quizá salgas un día a tomar una cañita en plan tranqui y acabes quemándola.

Besitos