491. Tresviso

¡Por fin sueño cumplido! Mi aspiración de subir andando a Tresviso, uno de los pueblos más coquetos y especiales que conozco se ha hecho realidad.

He tardado, lo reconozco, llevo queriendo ir a Tresviso cerca de tres años pero como nunca es tarde si la dicha es buena, pues el 29 de octubre de 2011 pasará  la historia como uno de esos días en los que sientes que la vida merece la pena, uno de esos días donde la sensación de libertad es tan grande que ni siquiera se puede expresar poniendo los brazos en cruz, la forma más gráfica que yo conozco para explicar ese agradable estar.

Es cierto que hubo un momento en que temí que una vez más fuera un nuevo espejismo, que tampoco se iba a convertir en realidad pero I. no dejó que cayera en saco roto. Al final salió muy bien, aunque no pudo ser que fuéramos todos los que a mi me hubiera gustado que vinieran pero el grupo fue de ocho personas, un gran grupo para pasar un gran día. Risas, gastronomía, deporte... ¿qué más se puede pedir?

La ruta no es tan fiera como la pinta, es durilla, si, pero todo se olvida cuando al llegar arriba hincas el diente a un quesuco de esos que han dado fama al pueblo y que tras subir un desnivel de más de 800 metros, sabe a gloria bendita.

No estoy en tan mala forma física como yo me creía, al menos para andar.

Era finales de octubre pero hasta la meteorología se apiadó de mi para hacer mi sueño (uno de ellos) realidad.

En lo que a senderismo se refiere, estoy en fase de buscar nuevo destino. El Asón es probable, para qué luego digan...

490. Acorralada

Acorralada, así me he sentido esta mañana otoñal de octubre. Sin poder salir de la calle a echarme a caminar por la lluvia y con muchas horas por delante para mí sola.

Igual que la manzana en este frutero, rodeada de gente extraña, con la que no tiene nada en común salvo estar incluida en la etiqueta FRUTAS

¿Y por qué? Pues bien sencillo. Buscando un quehacer gratificante tras las rutinarias labores del hogar, decidí buscar en internet una clase on line de alguna actividad deportiva (aerobic, pilates, yoga...) y trasteando, buceando o navegando, a gusto del consumidor, pues encontré clases de ZUMBA, no lo había oido en mi vida pero el titulo resultaba atractivo y la explicación también pues se supone que al tiempo que haces deporte aprendes bachata, chachacha y demás bailes latinos.

Y allá que me fui yo al youtube para ver qué se cocía y con mi sudadera y mi pantalón de chandal.

El ceremonial ha sido también de traca. Al final me he decantado por plantar mi flamante nuevo portátil en la sala de estar, la salita, encima del equipo de música y en el rellano central, con espacio limitado pero suficiente, mi cuerpo que no mi mente ahí, dispuesta a aguantar el tirón.

PLAY. Y un chico sudamericano potentorro aparece en primer término con una veintena de féminas tras de él. Comienza la música, pachangueo puro y duro, de hecho, me sonaban muchas de las canciones, y todos a una como Fuenteovejuna a mover hasta el músculo más insospechado, ese que yo aún no se que tengo.

En ese momento, he empezado a preguntarme ¿Por qué la gente baila tan bien y es capaz de seguir así el ritmo? Me he sentido acorralada porque era la única que me perdía y pudo jurar y juro que no era una clase de cuerpos 10, ni mucho menos.

Total, que después de perderme por decima vez consecutiva he decidido ir a mi rollo, siguiendo los cuatro pasos fundamentales y punto porque si no no puedo bailar y cantar al mismo tiempo el 'Salomé' de Chayanne. Y ¿qué quereís que os diga? Ya de sufrir al menos que el sufrimiento sea entretenido y pueda desahogarme gritando a pleno pulmon 'Baila que ritmo te sobra, baila, que bailamé, acercate un poquito Salomé'...

Media hora me ha durado la broma y me he pillado una sudada monumental.

Aunque me sientas acorralada entre tanta perfección, ¡ya sé ha que dedicar las lluviosas mañanas de mis días de cierre!

489. Mi 'riconera'

Que una bombonera sirva para meter bombones es una obviedad pero, ¿por qué no voy a poder meter otra cosa? Últimamente me paso tres cuartos de mi día a día contando calorías, el problema es que el cuarto restante me paso las calorías por el forro y todo el trabajo realizado en los tres cuartos se va, dicho claro y pronto, al carajo.

Llevo varios días mirando la bombonera del salón. Lleva tiempos vacía, muuuuuuuuuuuuuy vacia porque qué más quiere el ciego que ver y lo único que me falta es tener bombones tentándome cada vez que me siento en el sofá.

Total,m que al final he decidido hacer mis propios bombones y he aquí el resultado:

Casi todo sin azúcar, a excepción de las picotitas, que me encantan, y hay días en la vida de toda mujer en la que el azúcar es indispensable en la dieta. Realmente no es lo mismo, cuando después de comer buscas'algo rico' (como siempre dice mi hermana entendiendo rico por chocolate o dulce) y ves un frio caramelo de colia o un mísero chicle de happident pues hombre, prefieres casi mantener el gustillo de la comida. Y eso también es bueno. Me van a durar meses los caramelos en la boimbonera, a partir de ahora 'riconera'

488. Perfumes y otras historias

Lo humano, a veces, apesta.

El hedor es tan intenso, tan nauseabundo, que por mucho que intentes esquivarlo, girar la cabeza hacia otro lado, dirigir la nariz hacia el cielo para aspirar aire limpio, es imposible, acabas impregnado de ese tufo, incapaz de quitártelo de encima por mucho que te alejes o que laves la ropa.

Lo triste es que para llegar hasta ese mal olor, primero han venido épocas que olfateaban primaveras, que dirían Delinquentes, momentos en los que todo eran flores.

Pero de pronto, de golpe y porrazo, en un zas quizás buscado o quizás llegado poco a poco, sin apenas percatarse, ese perfume privameral va cambiando, va tornándose en otros aromas, se incorporan nuevos aceites, oscuras esencias y lo que era una colonia celestial se convierte en una cochinera.

Algunos lo llaman mal rollo.

487. Pelos out!

Me encanta ir a la peluquería y decirle a la peluquera: Haz con mi pelo lo que quieras!!! En realidad hoy sí sabía yo misma lo que quería pero no sabía si el resultado, si cuando se plasmase sobre el papel (léase pelo) iba a quedar como yo lo había imaginado.

Estoy satisfecha, sí, desde luego, estoy mucho mejor de lo que estaba. Corto por detrás y largo por delante (jo, acabo de recordar una canción de infancia "cortita por delante, larguita por detras,. con siete volantes y adios mi capitán..."). Me ha quedado bastante bien, definitivamente el pelo largo, si es a capas, no me queda nada bien.

Lo mejor de todo el precio. 9,95 euros el corte. Cosas de los lunes. Bueno, y sin hablar del tiempo, menos de media hora, asi sí que da gusto cambiar de look. NO me lo ha peinado, todo sea dicho de paso, pero casi que mejor, que normalmente con los potingues que me echan y lo repeinada que me ponen me siento hasta incómoda.

Pelos out... y sigue pasando la vida!!!

486. En el Peggy Sue

Decididamente, la amplia variedad de opiniones en lo que respecta a un sitio concreto hace que resulte casi imposible dejarte guiar por lo que el resto diga, aunque bueno, está bien para no llevarte sustos.

Había escuchado hablar mucho de un nuevo sitio en Santander, bueno debe llevar abierto al menos cuatro o cinco meses, si no más, el Peggy Sue, una especie de hamburguesería al más puro estilo Grease. Total, que ayer, que hacía una noche un poco bluf´y no estaba yo para muchas fiestas, decidí que era una buena ocasión para probarlo.

Se lo dije a... anda, nuevas siglas, a A.L. que le pareció bien justo antes de preguntar en la redacción a la gente que habia ido qué le parecía. Total, que se armó un revuelo impresionante en Carlos Haya. Carísimo, una mierda, no merece la pena, fatal la calidad... total que lo más bonito que escuché fue un,¡hombre, para ir una vez y conocerlo pues vale!.

Se me quitaron las ganas de ir, la verdad. Total, que ya me había decantado por un clásico entre los clásicos, un Britannia. Llegamos y había un montón de gente, una fila de al menos esperar una hora. Impresionante!!!! Y eso que eran poco más de las nueve de la noche. Total, que me dije que de perdidos al río y que si yo quería conocer elñ Peggy Sue pues habría que ir al Peggy Sue...

Y me gustó!!! A ver no es la panacea, es caro, la variedad no es grandísima pero no sé, es algo distinto, mola la decoración, la mítica musica sesentera o setentera, las gramolas, las mesas al más puro estilo americano. Pedimos unas patatas con trozos de bacon y queso chedar; A.L. un sandwich que traía consigo un botecito con una salsa bastante buena. Yo una hamburguesa con cebolla, bacon, queso y no me acuerdo qué mas. La carne estaba buiena, era muy gorda pero no estaba muy hecha, apunte importante para la proxima vez y para terminar un brownie con una bola de helado para compartir (de tamaño considerable, menos mal que se nos ocurrió compartir!!) Total, que yo sali estragado, llenísima, si ni siquiera hueco para la caña que pedimos después en otro garito.

Pues sí, caro pero recomendable para ir muy de vez en cuando, cuando quieras meterte entre pecho y espalda una proporción desequilibrada de calorías

485.Vuelvo a ser dueña de mi espalda

Hoy no voy a decir nada que luego todo se sabe...

Mi espalda va un poco mejor, al menos ya no me mareo, que estaba super asustada con los vértigos.

Ayer fui a ese nuevo centro de fisioterapia, de gente que antes trabajaba en el racing y tras varios triscones, mi espalda parece que vuelve a ser mía. La semana que viene vuelvo y después cuando me den la radiografía para mirarla juntos.

Aún me duele, claro, pero entre las pastillas que ayer me recetó la medica de cabecera, la crema antiinflamatoria y la sesión del fisio, pues la cosa va para adelante. Estoy intentando mantener la postura adecuada y aunque el dolor sigue siendo intenso, ya es más llevadero. ¡Qué malísima he estado el lunes! No se lo recomendaría ni al peor de mis enemigos.

484. Crack!!!

¡Crack!, ¡plim!, catacras!... algo así es lo que ha hecho mi espalda.

El sábado vino la fisio a casa e incluso tuvo que sentarse mientras me trataba. Me preguntó incluso si había tenido un accidente reciente porque no era normal mi situación. 'Horroroso', tienes la espalda que no hay por donde cogerla, decía.

Tengo la espalda fatal no, peor. Algo que ya sabía pero que nadie me habia dicho asi de forma tan clara. La cosa es que al día siguiente me dolia de forma exagerada, ni los ibuprofenos conseguían aliviarme esas 'agujetas' que me habían salido después de que la fisio anduviera y anduviera hurgándome.

Hoy, ya lunes, lo tengo incluso peor. No voy a esperar a que este chica pueda volver a atendernos, esta misma tarde voy a llamar a esa nueva clinica racinguista :) que han abierto dos calles más allá de la redacción.

Mi idea hoy era ir a caminar pero mi espalda me ha advertido que eso no era buena idea, que mejor no tentar demasiado a la suerte y esperar a que este dolor pase.

No quiero quejarme demasiado pero la realidad es que si, que me duele la espalda... muchisimo.