21 octubre 2012

518. Croacia (IV)


El Jueves nos toca Montenegro. Cambiamo de país y volvemos a ser de la Unión Europea. Yo creo que más allá de Eurovisión, Montenegro no sabría (ahora ya si) situarlo en el mapa.

El viaje nos cuesta 260 Kn también (37 euros más o menos). El bus nos recoge a las 8.30 en la puerta del hotel. En la frontera sube un guardia y nos pide el pasaporte pero no lo sella. La primera parada es en una gasolinera con un supermercado donde las cosas están baratísimas. Tiene que haber algo raro porque no es normal., Ya podemos pagar en euros. Hacernos las primeras compras.

Montenegro es mucho más verde que la parte de Croacia en la que estamos. Hay tormenta y amenaza con descargar de un momento a otro.



Una impresionante bahía, dicen que es una de las más espectaculares del mundo perfila todo el país, que no debe ser muy grande. La carretera la rodea y podemos ir entretenidos viendo el paisaje, es precioso. Llegamos a KOTOR, primera de las paradas. Es un pueblo al que también llegan cruceros. También hay una ciudad amurallada, una fortaleza de tipo medieva salpicada de iglesias católicas y ortodoxas. Desde luego, el sitio merece la pena verlo, es muy muy bonito. El problema es que el tormentón descarga en ese momento y tenemos que refugiarnos en unos baños públicos.

Nos han dejado hora y media para verlo antes de poner rumbo a Budva, la ciudad turística por excelencia, destino habitual de rusos. Es cierto que hay muchísimos y además del idioma autóctono, las pizarras de los restaurantes están más en ruso que en inglés me atrevería a decir. Los souvenirs aquí son muy baratos, hacemos algunas compras y vamos a ver la ciudad amurallada que es bastante cara en comparación con lo que después encontramos fuera. Mucha boutique y tienda de firma. Hay mucho contrastre de precios de un sitio a otro.

Antes de esta parada, vamos a un mirador desde el que se ve lo que se supone que era un antiguo monasterio y ahora se ha convertido en un hotel de lujo, exclusivo para deportistas de élite y gente de dinero, de mucho mucho dinero. Creo que la noche en este sitio son unos 3.000 euros.

Comemos unas especies de wrap en un kiosco que encontramos a nuestro paso y unas patatas que se llaman torpedo o algo así muy curiosas, están cortadas en espiral. No tenemos mucho tiempo Ya de vuelta a Cavtat, en lugar de rodear la gran bahía como hemos hecho por la mañana, cogemos un ferry con el que se adelanta mucho tiempo para volver al hotel.

No hay comentarios: