21 octubre 2009

350. Sesiones de mimos

"Trata de sobrevivir y te prometo una sesión de mimos para recuperarte del todo", le dijo la trucha al trucho, ¿o fue el trucho a la trucha? Lo mismo da, lo importante es que en ese momento el universo se paró, la paz se hizo eterna y los gritos enmudecieron gracias a iluminadoras sonrisas que impidieron ver más allá de ese instante único, inclasificable, indescriptible...

La garganta cesó en su empeño, las mucosas se paralizaron por momentos, la cabeza bajó de esa montaña rusa en la que había estado aupada toda la tarde y las gélidas nieves que congelaban el cuerpo dieron paso a una brisa cálida, suave...

¡Qué bello es, a veces, vivir (gripazo incluido)!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

El trucho a la trucha no??? No es la trucha la enferma??

Bsus

Una conformista vital dijo...

el trucho a la trucha, of course! si no no tendría sentido, jajaja, pero era por seguir el dicho al pie de la letra. Este es el mejor post que he escrito en mucho tiempo. Sin duda