15 noviembre 2005

63. Regalos directos y otras muestras del mercado

Ultimamente me paso el día conectada a Internet. Bueno... lo de 'últimamente' es un decir que queda muy bien escrito porque la verdad es que llevo años enganchada a la 'red de redes' (otro topicazo). Me he hecho adicta a las páginas en las que te ofrecen regalos directos, muestras gratuitas, sorteos, concursos, dinero por publicidad, etc. He hecho hasta un máster sobre ellos. Al principio, seleccionaba un poco las ofertas porque, por ejemplo, ¿para qué narices quiero yo comida para gatos o perros? Hombre, podría probar a ofrecérsela a mi padre, que pa`l caso... No veáis la alegría que es llegar a casa, abrir el buzón y encontrarte un sobre a tu nombre con muestras de champú, botecitos de perfume, carteras, porta moviles, pasta dentífrica, moldeador, sopas, libros de recetas, pañuelos, toallitas, condones, guías de nutrición, compresas, tampax (bueno, de estas dos últimas cosas creo que me entrará la menopausia y todavía me quedarán muestras gratis). Pero teniendo en cuenta que también me han mandado muestras y más muestras de las Tena Lady que me garantizaran las existencias cuando esté menopáusica y tenga incontingencia urinaria... tengo garantizado suministro hasta mi muerte y seguro que mis descendientes podrán también seguir haciendo uso de ellas. ¿Quizás pueda montar un pequeño negocio con ellas?
Estareis pensando que menuda mierda de regalos que me envían pero es que no acaba ahí la cosa porque el año pasado por estas fechas, (y eso que al principio he escrito que es ultimamente cuando me he enganchado a este tipo de páginas) me enviaron un paquete certificado con un... CEPILLO DE DIENTES ELECTRICO, recambios incluidos, de una marca muy aceptable, diría yo, del mercado.... que, por cierto, me hizo el apaño de los Reyes de mi hermana, dicho sea de paso.
Eso sin contar que desde que Marisa ganó un viaje a Londres en una de estas páginas, mi afición a ellas se ha multiplicado en un 300 por cien y el Mini (al coche me refiero) que llevan dos años sorteando, tiene escritas con letras de oro mi nombre (seguro que todos sabéis de lo que hablo) a pesar de que Marisa se empeñe en demostrar lo contrario enviándonos cada dos por tres un nuevo registro de participación. Lo siento Marisa, "Afortunada en amores, desafortunada en el juego"
Otra historia son las páginas en las que te dan dinero por leer publicidad. Tras meses y meses, quizá 18, inscrita en una de ellas, he llegado a la asombrosa cantidad de.... 2.95 euros. Con un sueldo así creo que voy a plantearme dejar el curro porque tengo garantizado un plan de pensiones que me permitirá vivir de las rentas de leer anuncios. Claro, que diariamente cuando abro el correo que he dedicado en exclusiva a este tipo de anuncios me encuentro fácilmente con 50 mensajes nuevos... la mayoría en inglés para más INRI. ¿Merece la pena un correo saturado por un tampax?